La feria Barcelona Seafood Show estuvo lleno de actividad, ya que se reunieron productores y clientes de todo el mundo. Aunque se celebraron muchas reuniones, solo se concretaron unas pocas ventas.
Durante toda la feria, el sentimiento dominante fue que los precios de los camarones bajarían, pero aún está por ver el alcance exacto.
La festividad del 1 de mayo en China dio lugar a un aumento del consumo local, ya que numerosos ciudadanos chinos se fueron de vacaciones.
Mientras tanto, la producción india de camarones no alcanzó grandes volúmenes.
La situación actual en Ecuador implica:
- Las continuas lluvias afectan a las cosechas.
- El inicio de la primera cosecha de mayo.
- Las fábricas trabajan para completar la mayoría de los pedidos pendientes.
- Los clientes chinos insisten en reducciones sustanciales de los precios, lo que hace que los precios deseados sean inalcanzables para los agricultores.
- Los precios de las materias primas siguen siendo inciertos, pero todos prevén una estabilización.
El resultado ideal implica encontrar un equilibrio entre los precios de las materias primas, los precios de venta en fábrica y los precios que los clientes chinos están dispuestos a pagar. Este equilibrio, sin embargo, puede no alcanzarse si:
- Los agricultores optan por cosechar lo mínimo, a la espera de mejores precios en cosechas posteriores.
- Los compradores chinos posponen sus compras a la espera de nuevas caídas de precios.
Por el momento, se han reducido los precios de las tallas de los camarones 20-30, 30-40 y 40-50, pero aún no está claro si estos precios son definitivos o aún podemos esperar alguna rebaja. Mientras tanto, se espera que el impacto en las tallas 50-60 y 60-70 sea menos pronunciado debido a su menor volumen.